Burnout

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“Deliverect agrega, ordena y hace que fluyan los pedidos“.

Burnout pasa de 30 a 200 pedidos diarios gracias a Deliverect

Seis años después de que Burnout abriese su primer local en Fuencarral 148 después de decenas de pruebas y desarrollos, sus hamburguesas son conocidas en todo Madrid: desde las más clásicas como la BUN BAN o la BURNOUT SMOKIN, hasta las especiales de la casa, como la SAVOY SPECIAL o la HOLY CAMOLY. 

Saborear alguna de sus muchas hamburguesas, o cualquier otro plato de su carta como ensaladas y entrantes, es toda una experiencia: accesible también desde su icónico local, en Valverde 6, o a domicilio. De hecho, muchos conocen Burnout gracias a su servicio de delivery, un servicio con el que han sabido maximizar sus ganancias y deleitar a todo Madrid con sus sabores. ¿La receta para conseguirlo? Una carta inmejorable y Deliverect, como confirma Álvaro Becerril, fundador y director de Burnout.

Optimizar el reparto a domicilio, fácil con Deliverect

Cada vez son más los que optan por pedir comida a domicilio en su día a día y esto, sumado al hecho de que los pedidos suelen entrar en las mismas franjas horarias, puede pillar desprevenidos a los locales que empiezan en el mundo del delivery. Este fue el caso de Burnout: «Cuando empezamos a trabajar los pedidos a domicilio, la operativa de las distintas plataformas no era posible manejarla. Nos entraban muchos pedidos, se nos colapsaba la cocina, se nos colapsaba la barra, que es donde se reciben los pedidos. No se podía procesar toda la información que llegaba, no nos daba tiempo a pasarlo a la cocina, nos veíamos obligados a cerrar las plataformas. Hemos estado así durante años», admite Becerril.

Por suerte, Deliverect ofrece las herramientas necesarias para gestionar la entrada de pedidos desde distintas plataformas de forma eficiente, incluso en hora punta: «Deliverect lo que ha hecho es conseguir que eso fluya, nos hemos olvidado del problema. Hemos pasado de tener un máximo de 30 pedidos a tener 200. Este problema desaparece porque todos los pedidos entran automáticamente en cocina».

Deliverect, el impulso que necesitaba Burnout

Una gestión de pedidos fácil se traduce en una mayor producción, y así ha sido también para Burnout: «Hemos pasado de ir de 60 km/h a ir a 180 km/h. No sabíamos que podíamos ir a 180 km/h», confiesa Becerril, que dejó la abogacía para centrarse de lleno en el mundo de las hamburguesas.

Hay, además, otra consecuencia de centralizar la información con Deliverect: «tienes varias plataformas, tienes el caos total de todos los tickets que te han entrado, no sabes muy bien ni quién ha vendido más, ni qué es lo que has vendido». Ahora, sin embargo, con las estadísticas y datos de Deliverect, Burnout sí sabe qué es lo que gusta más a sus clientes, un dato clave para seguir optimizando el negocio. 

«Hemos pasado de ir de 60 km/h a ir a 180 km/h»

En definitiva, True Burguers

El fundador de Burnout no se arrepiente de trabajar con Deliverect, y tiene clara cuál es su principal ventaja: «Antes había que hacer un trabajo manual de ir picándolo todo. Deliverect agrega, ordena y hace que fluyan los pedidos de las distintas plataformas». También está satisfecho con su funcionamiento: «Nunca hemos tenido ningún problema de que nos haya fallado Deliverect, si hay algún problema operativo en algún momento, siempre es con alguna plataforma».

Deliverect ofrece soluciones a los problemas con los que se encuentran todos los locales que ofrecen delivery y siempre va un paso más allá con sus clientes: «El servicio al cliente de Deliverect, sinceramente no sabría bien cómo valorarlo porque yo personalmente no les he tenido nunca que llamar», concluye Berrecil. De haber sido así, Burnout hubiera obtenido respuestas inmediatas para poder seguir repartiendo en Madrid lo que ellos mejor saben hacer: True burguers.